Doping biológico en el fútbol.

Cómo futbolista uno de los aspectos que más debe preocuparte en la temporada es la recuperación.
Es imposible que puedas volverte más fuerte, rápido y potente si no eres capaz de gestionar bien la recuperación entre entrenamientos y partidos.
No se puede estar siempre apretando el acelerador, si no, acabamos estrellándonos o quemando la máquina cuando lleguemos a diciembre.
¿Qué estrategias de recuperación podemos utilizar?
Para potenciar la recuperación tenemos una gran variedad de estrategias que van desde las que funcionan y son el pilar básico de la recuperación a las que son puro humo y marketing.
Claramente te interesan las primeras y las que están en un punto intermedio.
En estos artículos de aquí, aquí y aquí te hablo de algunas de ellas y haciendo clic en “protocolo de recuperación” puedes descargarte un protocolo que tengo para que utilices toda la semana.
Pero hoy, vamos a hablar del entrenamiento de fuerza y el doping biológico.
Doping biológico.
La prescripción del entrenamiento de fuerza de la parte superior del cuerpo el día después del partido ha surgido recientemente como una modalidad de recuperación más a implementar durante la semana.
Si bien no es que haya una gran cantidad de evidencia al respecto (aún), es una de las técnicas de recuperación activa usadas, ya que provoca un aumento de la testosterona (hormona anabólica) y una disminución del Cortisol (hormona catabólica).
Este tipo de entrenamiento puede disminuir la degradación muscular provocada por el partido y mejorar con ello la recuperación.
Por eso se le conoce como el “Doping Biológico en el fútbol“.
A continuación te dejo dos ejemplos de sesión para el MD+1 que realizo dentro del programa High Performance Method para futbolistas, para que puedas ponerlo en práctica y si quieres, me cuentes tus sensaciones por mensaje privado en Instagram.
Sesión 1 doping biológico en el fútbol:
Sesión 2 doping biológico en el fútbol:
Respuestas