El entrenamiento oclusivo (BFR) como estrategia de recuperación.

El entrenamiento oclusivo (BFR), es una metodología de entrenamiento que surge en los años 70 con un objetivo bien definido: ganar fuerza y masa muscular.
Sin embargo, en la última década las investigaciones sobre esta peculiar herramienta de entrenamiento han ampliado sus áreas de investigación.
Por ejemplo, la aplicación del entrenamiento oclusivo de manera pasiva o con acciones isométricas podrían potenciar el estímulo hipóxico/metabólico derivado de la oclusión y favorecer el ya conocido mecanismo de potenciación post activación (1,2).
Otro de las áreas que se han abordado con el entrenamiento oclusivo es en el área de la recuperación post ejercicio.
Aplicación pasiva del entrenamiento oclusivo (BFR Pasivo).
Se ha observado que la aplicación pasiva del entrenamiento oclusivo, realizando una oclusión y reperfusión durante varios ciclos seguidos, inician un mecanismo protector que actúa para mitigar la futura lesión celular.
Esta forma de aplicar el BFR se conoce también como Ischemic Pre conditioning (IPC) y se sabe que estos episodios mejoran la vasodilatación, la utilización de oxígeno y la función muscular además de mejorar el rendimiento en algunos ejercicios.
En el estudio de Beavan et al. (4), aplicaron el BFR con el objetivo de mejorar la recuperación después de un ejercicio intenso.
Para ello realizaron un protocolo de BFR pasivo de 2x3min por pierna a 220 mmHg que dio como resultado una mejor recuperación de la producción de potencia y el rendimiento del sprint, tanto inmediatamente como 24 h después de un entrenamiento intenso.
Otros protocolos también han sido estudiados.
En el estudio de investigación de Arriel Et. Al (3), utilizaron esta técnica (2 × 5 min o 5 × 2 min) que mostró una mayor recuperación y mantenimiento del rendimiento 24 h después de un entrenamiento intenso en comparación con el grupo de control.
Los mecanismos que explicarían estos beneficios no están del todo claros, pero podrían explicarse por la reducción de la respuesta de la creatina quinasa, la reducción del dolor muscular de aparición tardía y la reducción de la hinchazón después del ejercicio intenso.
Esto conduce a una mejor y más rápida recuperación en la producción de fuerza.
Aplicaciones prácticas.
Actualmente los calendarios de competición son tan exigentes que obligan tanto a jugadores como a los preparadores físicos a optimizar la recuperación.
Bien conocidas son otras estrategias como la crioterapia, foam roller, masajes etc
Todas con mayor o menor nivel de evidencia.
No tan conocida es la aplicación del entrenamiento oclusivo, que, si bien todavía requiere de mayor evidencia, podría formar rápidamente parte de protocolos de recuperación para mitigar los efectos negativos relacionados con el exceso de fatiga y daño muscular.
Si me permiten especular sobre la información actual, el entrenamiento oclusivo podría usarse para preparar a los deportistas de cara a períodos muy intensos de entrenamiento o competencia.
La recuperación muscular a menudo está limitada por el flujo sanguíneo y la cantidad de daño tisular que se ha producido.
El BFR podría favorecer el aumento del crecimiento vascular y la proliferación de células satélite mitigando el daño y favoreciendo el aumento del flujo sanguíneo.
Además, es importante resaltar que es un dispositivo liviano, versátil y portátil.
Esto permite su uso en la misma instalación deportiva sin necesidad de desplazarse e incluso durante los trayectos de vuelta a sus domicilios en el transporte que utilicen.
Puedes seguir formándote en entrenamiento oclusivo o estrategias de recuperación con estas formaciones de la Sports Academy.
Msc Daniel Pereira
Bibliografía.
- Doma K, Leicht AS, Boullosa D, Woods CT. Lunge exercises with blood-fow restriction induces postactivation potentiation and improves vertical jump performance. Eur J Appl Physiol. 2020. doi:10.1007/ s00421-020-04308-6.
- Slysz JT, Burr JF. Impact of 8 weeks of repeated ischemic preconditioning on running performance. Eur J Appl Physiol 119: 1431–1437, 2019.
- Arriel RA, de Souza HLR, da Mota GR, Marocolo M. Declines in exercise performance are prevented 24 hours after post-exercise ischemic conditioning in amateur cyclists. PLoS One 13: 1–12, 2018.
- Beaven CM, Cook CJ, Kilduff L, Drawer S, Gill N. Intermittent lower-limb occlusion enhances recovery after strenuous exercise. Appl Physiol Nutr Metab 37: 1132–1139, 2012.
Respuestas